Haciendo el amor

21 junio, 2013

Gregory Colbert

Gregory Colbert

Desde la revolución sexual de los años 60 y hoy en día de una manera exacerbada las personas salen, se encuentran y establecen contacto sexual de manera inmediata, ellos más por lograr una descarga y satisfacción a su tensión sexual, ellas más por sentir la posibilidad de una relación emocional en la que involucrarse.

Ahora bien, no tenemos conciencia de que la consumación del acto sexual crea un vínculo indisoluble que tiene efectos profundos en el alma. Y luego nos preguntamos porque nos sentimos tan apegados o vinculados a esa persona si “solo ha sido un polvo”.

Hombres y mujeres anhelamos un encuentro verdadero de alma a alma, de corazón a corazón, cuerpo a cuerpo. Necesitamos vivir un amor hecho de pequeños gestos, miradas, deseo, ternura, comunicación, pasión. Sucede que las parejas dejan de hacer el amor después de los primeros años, lo dejan como se deja meditar cuando uno sabe a ciencia cierta que es bueno.

Y en una relación de pareja es primordial hacer el amor, la disminución de la práctica sexual implica una disminución de energía en la relación. El amor se estanca y la energía se dirige hacia otros lugares. Ya sabemos que la energía va a donde se dirige la atención.

Si queremos una relación de pareja viva es necesario dedicarle tiempo y energía, y comprometerse a ello. Cuando se disminuyen los encuentros sexuales el amor va decayendo, dejan de alimentar la relación con la energía sexual, que es su principal nutriente. Una relación precisa atención, cariño, energía para que siga creciendo, como se cuida un jardín.

Hombres y mujeres queremos cosas similares en una relación: confianza, respeto, apoyo, compañerismo, juego. Todos queremos intimidad, física y emocional. Las mujeres nos inclinamos hacia la intimidad emocional, y los hombres a la intimidad física, al acto sexual. El amor tántrico une estos dos tipos de energías: la intimidad y la pasión sexual.

Una buena relación es aquella que tiene una buena cantidad de buen sexo. Siendo así los amantes se convierten en sanadores el uno para el otro. Las mujeres hemos de saber que cuando castigamos a los hombres sin sexo estamos cavando una tumba para la relación.

Una amiga me dejó el libro Haciendo el amor de Barry Long. Leo en Wikipedia que Eckhart Tolle asistía a sus charlas y seminarios, que interesante coincidencia. En su libro formula un camino de iluminación para ser más amorosos y conscientes, y dice que primer lugar hemos de preguntarnos si nuestra vida amorosa es suficientemente buena. Si la respuesta es “no” nos propone cuatro requisitos: compromiso, ausencia de emoción, práctica y perseverancia. Requiere que ambos compañeros se comprometan a empezar a hacer el amor de una manera nueva.

Sugiere hacer el amor sin emoción y sin imaginación, de manera que el falso yo salga del acto y dejar que los dos cuerpos (o almas) se encuentren verdaderamente el uno con el otro. Hay que hacer el amor con frecuencia, sin excusas, y perseverar porque a veces las emociones van a provocar un retroceso cuando el ego o falso yo entre en el juego e interrumpa el proceso.

Hombre y mujer. Dos mujeres. Dos hombres. En el encuentro sexual hay que comunicarse con la mirada y la palabra, expresar lo que uno siente: la satisfacción, la belleza del momento, las sensaciones, eso es lo que mantiene a la pareja presente, consciente, unida. Confiar el uno en el otro sin evadirse, manteniéndose en comunicación y presentes. Es importante el compromiso de elevar la conciencia a través del amor y la honestidad, y ser generosos en el tiempo para hacer el amor.

Es fundamental ser vulnerables al amor, valientes para abrirse al amor, no cerrarse por haber sido heridos en el pasado, no dejar que el miedo nos endurezca. Dice: “Haz el amor cuando haya suficiente amor y puedas estar presente para el otro” y “no te enamores, se amor”, enamorarse es cerrar los ojos y fantasear. Sé amor, una presencia abierta, nueva, fresca.

Requisito importante es reducir la emocionalidad, la excitación, la incertidumbre sobre si el otro estará disponible o no, soltar el miedo. Tiene que haber disponibilidad para que disminuya el deseo y aumente el amor. Soltar el “no tengo ganas” y dejar que los cuerpos se amen, sin más, sin que el ego se interponga. Los cuerpos saben cómo hacerlo. Dejarse de fantasías eróticas porque eso es del ego, no es presencia del alma.

Hay evitar incluso los preliminares para reducir la excitabilidad, abandonar el juego amoroso previo al que uno estaba acostumbrado para excitarse con la pareja. Desvestirse, mirarse a los ojos y acariciarse con plena presencia, viendo el cuerpo del otro, su belleza, su luz, su energía. Quedarse desnudo psicológicamente, ser inocente y vulnerable, sin adelantarse a lo que vendrá, manteniendo un diálogo amoroso con el otro.

No somos conscientes de que reprimimos la respiración para evitar estar completamente presentes. Tenemos miedo a la presencia, miedo a sentir, a la entrega, a perdernos en el otro. El mejor regalo es la presencia, la verdadera presencia, estar ahí para el otro. Amar es estar presente para el amado. La respiración consciente es el puente entre la mente y el cuerpo, mirarse y respirar al unísono es la mejor muestra de presencia.

Art by Olga Matsaeva.

Olga Matsaeva

Él da una y otra vez, la deleita sin excitarse, y ella se mantiene receptiva. Si el hombre tiene una gran erección se pone emocional y va en camino al clímax. No hay que poner la atención en emociones y sentimientos, se aspira a ser la sensación, a llevar a la conciencia la parte del cuerpo donde está el placer. Dice que el juego previo es como un pensamiento previo, ahí está interviniendo el ego.

Hay que practicar hacer el amor sin excitación, solo presencia. Poner los cuerpos juntos y hacer el amor, manteniendo apartada la imaginación y los pensamientos. Presentes al amor y las sensaciones, desapegados de las experiencias y recuerdos del pasado. Amarse con los ojos abiertos; atentos, pacientes, considerados.

La firmeza suave es el modo del amor. Suave y amorosamente, sin forzar. No hay movimientos practicados, no hay movimientos deliberados, ni contorsiones; el cuerpo lo hace por sí mismo. Hacer el amor sin emoción significa estar con plena presencia en el encuentro sexual, de manera que las emociones del pasado (tristeza, resentimiento, enojo, dolor) no intervengan, dejar el pasado donde tiene que estar y gozar en el presente.

Solo se puede hacer el amor en el presente cuando no has perdido tu presencia, dejar atrás el falso yo y no permitir que eche a perder el momento. Sé tus sentidos, no tu mente, sé tu cuerpo, permanece donde estás.

Es posible fantasear sobre el sexo, pero no sobre el amor. Estar psicológicamente presente significa que no te dejas arrastrar por el cúmulo de sentimientos, imágenes, recuerdos del pasado ya que cuando es así uno ya no está haciendo el amor, ha dejado de ver a su pareja y se ha ido a su propio mundo interno. El cambio fundamental solo puede ocurrir aprendiendo a estar consciente en el amor, haciendo el amor por amor y no por ti mismo. Esto significa estar ambos psicológica y espiritualmente presentes durante el acto de hacer el amor.

Hacer el amor irá acompañado de una creciente unión y sensación de quietud y paz, y de un sutil desapego de las preocupaciones y ansiedades de la  vida cotidiana. Long afirma que este juego amoroso es el más raro estado de comunicación sobre la tierra. Practicando hacer el amor la pareja se siente atraída más cerca de la realización de la consciencia y del amor mismo, a la unión consciente de los Principios Masculino y Femenino fuera del tiempo, en la presencia divina, la Conciencia Transcendente y el espíritu sublime del Amor y la Vida.

Siendo así, hacer el amor es una buena práctica de meditación en pareja, la práctica de la conciencia despierta, la experiencia íntima de Ser a Ser, de corazón a corazón, fluyendo en la impermanencia del momento presente, y en última instancia la experiencia de unidad y fusión con Dios.

 Texto original © Ascensión Belart.

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11 pensamientos en “Haciendo el amor

  1. Bueno no es solamente hacer el amor sin emociones, las posiciones también tienen mucho que ver, cada posición tiene que ser perfecta tanto pies como manos y depende de lo que trabajes va acompañado de un sonido o mantra como se le quiera llamar.
    Saludos.

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  2. Gracias por toda la info!!! Tengo unas preguntas:
    Una actividad sexual abundante no iría en detrimento de nuestra energía? Dejarse llevar por las sensaciones, por el placer físico no está íntimamente relacionado con el gasto de energía, al igual que los pensamientos innecesarios?
    Y que lugar ocupa la eyaculación o el alcance del climax, orgasmo cuando hacemos el amor?

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    • Según el Tantra, la exaculación en el hombre si que supone un derroche de energía, de ahí la importancia de que los hombres se contengan y no eyaculen en cada encuentro sexual. Las mujeres sin embargo nos cargamos de energía en las relaciones sexuales cuando hacemos el amor con amor. Si quieres saber mas, te recomiendo los libros de Davis Deida. Gracias Surya.

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  3. Los hombres son muy de usar y tirar… Ligados al plano físico, y lo que se dice el plano emocional… Es como si las emociones fueran algo inexistente en ellos… Incluso los sexólogos saben que en consulta una de las quejas mas frecuentes de mujeres involucradas en la pareja, es que ellas son solo acariciadas y tratadas con «mimos» cuando ellos quieren practicar sexo. Es decir recurrir a la propia pareja como artilugio viviente para descargar por pura necesidad fisiológica a causa de las ganas que genera la testosterona. Así pues para ellos el sexo en pareja sigue siendo una herramienta de descarga por pura necesidad fisiológica y no como expresión de amor a la pareja.

    Si hay una diferencia principal entre hombres y mujeres, es que el sexo no es equitativo por el embarazo. Las mujeres merecen amor por ello. Y es algo que anhelan en profundidad como parte de su ser atrapado en un cuerpo femenino (espero que el alma no sea femenina eternamente… Aunque dicen que el alma no tiene genero, no estoy tan segura, ya que ese anhelo tan profundo en las mujeres si no procede del alma de donde si no….. ) y se nos ha dado por compañero un ser que no sabe amar. O al menos no en la medida que la mujer necesita.

    Como bien dices en el articulo, los hombres van buscando solo una descarga por pura necesidad fisiológica, y como bien saben los sexologos, aun en la pareja recurren al sexo por la misma causa que cuando eran solteros.

    Hay hombres que dicen que el sex por el sexo no les va. (Unos pocos, muy pocos, demasiado pocos)

    El hombre es visual, las mujeres suplen esa necesidad a través de la belleza
    La mujer es emocional, y los hombres son adefesios emocionales.
    (Las mujeres son excelentes como consejeras y apoyo emocional, saben como hacerlo… Como bien dice el dicho sabiamente «LA NUJER ES LA PUERTA EMOCIONAL DEL HOMBRE» El hombre puede suplir su torpeza emocional, contar, nutrirse, con las destrezas de la mujer.
    Al revés, teniendo la mujer una alta necesidad de ser comprendida y escuchada, Los hombres no pasan ni de la escucha, y además dan soluciones cuando la mujer sólo busca comprensión. )
    Las mujeres debido al embarazo, buscan amor como sello de garantía de que serán cuidadas tras el acto. Y sin embargo los hombres solo quieren sexo. Quedarse con la buena parte. Poner la semilla, engendrar y abandonar en busca de otra para poblar el planeta y tener descendencia gratuita por ahí implicándose solo sexualmente.

    Por eso no veo que un hombre me complementa. Pero si veo como las mujeres suplen y satisfacen sus carencias.

    Ellos visuales, ellas hermosas.
    Ellas emocionales, ellos adefesios emocionales.
    Si ellos necesitan suplir su carencia a la hora de tratar con el mundo de las emociones, ahí esta la mujer para servirle con sus capacidades.
    Si la mujer necesita suplir sus propias necesidades como ser entendidas, comprendidas, escuchadas y consoladas, a tu disposición tienes un cromañon lerdo retrasadillo e incapacitado en ese aspecto como para poder cubrir aquello que como mujer necesitas.
    Si eres un ser vulnerable con necesidades propias por el embarazo, entonces ellos solo querrán sexo como en el pleistoceno. (Manda cojones siendo la parte vulnerable encargada de tener que hacer todo el trabajo y la cría de un hijo que sera de los 2 que solo quieran involucrarse sexualmente)

    Por todo ello, no veo que el hombre me complemente.
    Pero si veo como las mujeres cubren las necesidades de ellos….. (Salvo la sexual, de lo que tanto se quejan tan frecuentemente, cuando si las mujeres se sintieran amadas por ellos, ellos pedirían a sus mujeres descanso por agotamiento…. ) si la mujer no se siente amada el deseo sexual disminuye para evitar tener hijos con alguien que no la garantice cuidados. Esta verificado científicamente.

    Creo que por esonvivimos 10 años mas… No nos hacen vivir con vitalidad…. Y la pila la va soltando mas de poco en poco…

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    • si la mujer no se siente amada el deseo sexual disminuye para evitar tener hijos con alguien que no la garantice cuidados. Esta verificado científicamente. ***

      (Creo que la mujer, por ser portadora de un utero, es merecedora de ese amor, al igual que ellos tienen sus propias necesidades fisiologicas…. Pero que a diferencia de la mujer, para ellos no tiene mas coste ni consecuencia que el placer) como tu bien dices los hombres son sexuales, ligados al plano físico, y por evolución, mucho menos emocionales……. Dadas esas condiciones, dudo que un ser dotado de esas caracteristicas, pueda cubrir las necesidades femeninas siendo tan sexuales, físicos, y disminuidamente emocionales, emotivos y por tanto afectivos….

      Su necesidad visual es mayor, y esta bien complementada. Sus carencias emocionales, también las cubre la mujer.

      Todo lo que necesitan o carecen, la mujer lo tiene.
      De lo que nosotras necesitamos de ellos, estan disminuidos.

      No hay complementariedad ninguna…
      Que el 80% de divorcios o rupturas de pareja sea por parte de mujeres no es casualidad, que las mujeres se sientan utilizadas y ellos satisfechos, tampoco. Que ellos vivan en el paraíso terrenal solo por tener ojos, tampoco… Que las mujeres se quejen de no sentirse amadas, comprendidas y escuchadas mas de lo mismo

      Las leyes naturales están solo para satisfacerles y beneficiarles a ellos…

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  4. Las mujeres hemos de saber que cuando castigamos a los hombres sin sexo estamos cavando una tumba para la relación.

    Por cierto a caso no castigan todavía ellos mucho mas a las mujeres sin afecto ??? Y verbalmente cando callan y no atienden correctamente su necesidad de verbalizarse ??? Los hombres castigan a las mujeres mas, y en muchos mas sentidos…. Desde sus contestaciones frías, (porque son así) respuestas del tipo «bien» cuando la mujer desea comunicarse, eso es también un latigazo. Porque igual que el hombre es sexual y esta mal castigarlo sexualmente, la mujer es emotiva y comunicativa…. Y se la inflinje el mismo daño negándole esas necesidades…

    Que den ellos mas cariño, y la mujer si se siente bien, amada y protegida, querrá mas sexo…. Ellos son los causantes del estado de animo de sus mujeres como la luna es reflejo del sol…. Si tanto se las dan de protectores, que lo sean de verdad…. Y entonces dejaran de quejarse mundialmente de que las mujeres no quieren sexo. Si no se sienten queridas es normal, dad que ellos no están haciendo bien su papel brindando la protección.

    Ya lo explique antes, no sentirse queridas o amadas disminuye el deseo sexual como prevención para no tener hijos con hombres que no estén dispuestos a cuidarlas…. De ahí la importancia de sentirse amadas… Que a los hombres tira de un pie. Porque solo quieren lo que quieren. La mujer es todavía aun en las relaciones un objeto de descarga y no un ser amado…

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    • Observo mucha rabia, dolor y resentimiento hacia el género masculino en general. Se ve que has sufrido, que algunos hombres te han hecho sufrir, y tu lo has permitido también. Esto que dices: «Ellos son los causantes del estado de animo de sus mujeres como la luna es reflejo del sol» te pone en un lugar de dependencia que incluso te lleva a victimizarte. No creo que ese discurso te haga bien. ¿A dónde te lleva, a prescindir del 50% de la población? Todos los hombres no son iguales. Es cierto que a través de la historia se han dado esos abusos y malos tratos de los hombres hacia las mujeres, ahora bien, también las mujeres hemos tiranizado, maltratado y castrado a los hombres. Es hora de cambiar. Se trata de elegir bien, una vez has dejado atrás ciertos condicionamientos respecto a los hombres y las relaciones de pareja. Tu sabes lo que has vivido, lo que has mamado. Ya sabes: Creer es crear. Te mereces, nos merecemos crear relaciones de respeto, comprensión, apoyo mutuo, ternura, comunicación y entrega en la intimidad sexual. Muchas personas están dando un salto hacia un nuevo modelo, un nuevo paradigma en las relaciones entre hombres y mujeres. Entre todos podemos cambiarlo.

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